Querétaro, Qro.. / Mayo 15.-
“Tanta vanidad, tanta hipocresía, tu cuerpo después de muerto pertenece a la tumba fría…”
El estribillo de esta famosa plena puertorriqueña, elegida canción tema del Festival Siguientescena 2010, define a la perfección el ambiente vivido en estas jornadas artísticas.
Fiesta, arte, y una insaciable pasión por la vida, el placer y la alegría. Siguientescena, el 3er Festival Internacional Alternativo de Artes Escénicas, realizado en Querétaro, fue en ojos de los directores, artistas y espectadores todo un éxito.
El festival, que se efectuó durante abril ya principios de mayo, presentó 28 espectáculos, conciertos y propuestas artísticas de todo tipo, desde música, danza y teatro hasta circo, acrobacias y erotismo.
Los intérpretes variaron notablemente, desde actos locales poco conocidos fuera de Querétaro, hasta artistas de talla internacional, de varias partes del mundo, o de considerable fama nacional, como la agrupación regiomontana El Gran Silencio.
Siguientescena también constó de 11 talleres, impartidos del 26 al 28 de abril, por algunos de los artistas invitados a presentar algún espectáculo.
Algunos de los ofrecidos fueron: cursos de cuerda floja, danza acrobática, percusión corporal, improvisación musical, improvisación vocal y construcción de instrumentos excéntricos con materiales reciclados.
La diversidad de estos talleres también reflejaron la variedad de actividades y disciplinas apreciadas en el evento.
En cuanto a la ciudad, Querétaro podría levantarle una ceja a más de un escéptico que cree que esto no podría funcionar fuera de la Ciudad de México. Sin embargo, hay muchos eventos cuyo valor y éxito están tan firmemente ligados al lugar donde se llevan a cabo, que sería impensable sugerir cambiarlos de sede, y éste es uno de ellos.
Al principio, escuchar sobre un festival alternativo de artes escénicas en Querétaro sonaría poco razonable, pero después de visitar, conocer y sentir la ciudad, la capital del epónimo estado, con su gente amable y tolerante, su hermosa arquitectura colonial y su ambiente seguro pero activo, parece la indicada para dicho evento.
El hecho de que el festival sea tan bien recibido en Querétaro se debe en gran parte a que el gobierno del municipio permite que se presente en el corazón de la ciudad: el Centro Histórico.
Los diversos espectáculos fueron presentados en la Plaza de Armas y en el Jardín Guerrero, ambos lugares públicos muy reconocidos y frecuentados por la población queretana. Los escenarios, profesionales pero al aire libre, en combinación con la entrada libre a todos los eventos (excepto los de cabaret, que exigían mayoría de edad), facilitaron el acceso a los espectadores y el acercamiento al arte.
Para conocer a fondo la recepción del festival, hay que conocer las opiniones de las autoridades, los artistas y el público.
Revolución Interna es Independencia – el Director General
El Director General de un evento tan magnánimo como éste suele contar con cierta imposición física, y en un público o un tumulto, sobresale con facilidad. Éste no es el caso de Luis René Venegas, Presidente y Director General de Siguientescena 2010, quien se mezcla y se pierde con frecuencia entre los artistas. Sin embargo, no por esto es un director deficiente, y lo comprueba su elocuencia al explicar la idea y esencia del festival.
“El Festival Siguientescena es un punto de encuentro para las formas alternativas de hacer circo, danza, teatro y música,” comentó Venegas en una breve entrevista. “[Es] un puente para que esos artistas revolucionarios se encuentren, generen un intercambio y así transformen sus propuestas”.
Más allá de las presentaciones y los talleres, el evento contó con varios eventos cuyo objetivo fue de juntar a los diferentes artistas, provenientes de distintas partes del mundo, a colaborar y combinar sus talentos en un ambiente de total libertad e improvisación.
La producción “An-Danzas”, por ejemplo, fue una colaboración de más de 25 artistas que, partiendo de cuatro puntos diferentes del Centro Histórico de Querétaro, llegaron bailando, cantando, tocando y desfilando a la Plaza de Armas, trayendo consigo a todos los peatones que quisieran acompañarlos. También se llevó a cabo el “Camino de Fuego”, un desfile multidisciplinario con una temática relacionada al fuego, donde prevalecieron las percusiones africanas y brasileñas, así como los malabares y acrobacias con llamas.
“Siguientescena es un festival único porque, en el transcurso de la semana, no sólo se imparten talleres y se presentan diversos espectáculos, sino que además, los creadores convocados trabajan entre ellos, y a partir del intercambio de sus propuestas, generan espectáculos exclusivos para cada edición”, expresó el director.
“En nuestra experiencia del 2009, fuimos cómplices de cómo una bailaora de flamenco podía entenderse con un beat-boxer, o un DJ tocaba mientras acróbatas, bailarines, malabaristas, artistas y hasta breakers, interactuaban en el escenario de la improvisación”, agregó entusiasmado.
Estas fusiones no suenan tan raras una vez que se perciben plasmadas en el escenario. En cada edición del Festival, los artistas participantes componen una “Creación Colectiva”, un espectáculo de aproximadamente 45 minutos donde los talentos de todos los artistas se unen para crear una obra con cierta temática.
Este año, por ser el bicentenario, el tema fue la fiesta mexicana, y su ejecución fue magistral. Los bailarines acrobáticos recrearon una batalla revolucionaria; las malabaristas de fuego fungieron como La Muerte, vestidas de negro con máscaras y manos en llamas; los músicos, que variaron desde un grupo de rock hasta mariachis, interpretaron varias canciones mexicanas y latinoamericanas, haciendo combinaciones inimaginablemente eufónicas con sus instrumentos; el grupo de teatro incluyó una pequeña obra donde se representaba metafóricamente la búsqueda de la madre patria.
Esta Creación Colectiva fue la obra clave del Festival, donde se mostró el poder de la experimentación e improvisación, y las capacidades de los talentosísimos artistas invitados al evento.
“En eso radica la mayor y más característica fuerza de nuestra celebración”, concluyó Venegas, “en el intercambio de energía”.
Arte en Continuo Movimiento – los artistas
Las decenas de artistas participantes, de diferentes especialidades, orígenes e idiomas, lograron presentarse ante un público lleno de energía y aprecio, pero además ante otros artistas participantes, que gozaron de ver lo que sus colegas demostraron en el escenario.
“Me habría encantado ver las presentaciones de todos”, comentó Carolina Garibay, actriz de México DF que presentó un monólogo de 15 minutos. “A veces hasta dan ganas de no participar para tener tiempo de ver todos los espectáculos, en vez de estar en el camerino cambiándome o preparándome”, agregó entre risas.
“Durante todo el evento se siente un ambiente bien prendido e intenso”, expresó Denis Cantú, músico folclórico de Veracruz. “El formar parte de un grupo multitalentoso con gente de todo el mundo es una experiencia hermosa, y es inevitable interactuar con ellos”.
Un aspecto que contribuyó bastante a la interacción frecuente de los artistas fue el que estuvieran todos hospedados en el mismo hotel, así como que comieran y tuvieran tiempo libre juntos. En los ratos libres de los artistas, se les podía sorprender cantando canciones, bailando, o simplemente platicando de sus anécdotas en el show business.
Los artistas extranjeros también estuvieron sumamente entusiasmados por el Festival, y lo hicieron notar tanto con sus asombrosas presentaciones como con su actitud en conversación con el personal del evento y los demás artistas.
“Nuestro grupo es multicultural, pues el guitarrista es húngaro, el bajista es finlandés, y yo, el baterista, soy belga”, comentó Jonathan Callens, integrante de la agrupación de rock progresivo Humble Grumble. “Nos encantó venir porque es una excelente oportunidad para darnos a conocer en un país nuevo, así como para conocer la cultura mexicana, ya que es nuestra primera vez en este país”.
“Amo México, amo Querétaro, y amo hacer reír”, afirmó Jef Johnson, reconocido clown que ha participado en Cirque du Soleil. “Ya he venido bastantes veces a México y me encanta su cultura, su gente y su arte”.
Johnson además tiene la particularidad de que no planea sus actos, y se guía totalmente por el público que le toca. “Nunca hago el mismo show, porque nunca tengo el mismo público”, agregó.
Al ver la tristeza de artistas que, aún habiéndose conocido por tan sólo una semana, se despedían con lágrimas, intercambiando correos, firmando camisas e intercambiando CDs, se pudo comprender el nivel emocional en el que estos increíbles intérpretes interactuaron y se sincronizaron.
“Dan ganas de que todos los festivales sean así de interactivos y amenos”, comentó Andrés García, bailarín de folclor alternativo. “Espero de todo corazón poder participar en el siguiente”.
Alternativo es Progresivo – el público
Por más excelente que sea el nivel de los participantes, por más innovadora que sea la idea de improvisar y colaborar, si no se tuviera público, el Festival no sería exitoso. En esta edición, una promoción breve pero intensiva del evento logró que la comunidad queretana se enterara con algo de anticipación del evento. Sin embargo, una vez comenzado, la cantidad de interesados incrementó notablemente.
“Ni me había enterado del evento, pero como armaron un escenario enorme en Plaza de Armas, pues con eso tienes para atraer a todo Querétaro”, comentó un espectador y transeúnte. Las sedes del evento también contribuyeron a que no se necesitara demasiada publicidad, pues el Centro Histórico es tan concurrido que muchos que no tenían idea del evento se quedaron a verlo en sus ratos libres de fin de semana.
“Durante las mañanas, cuando los artistas hacían ensayos o sound check, recibí muchas veces la pregunta ‘¿a qué hora es el evento?’”, expresó una organizadora del Festival. “Me agradó muchísimo que nada más con ver los ensayos ya querían venir a ver la función”.
“En cada función de cada espectáculo, sin importar su duración o género, se contó un público promedio de entre 800 y mil personas,” comentó otro coordinador del evento. “Es toda una satisfacción el estar en el escenario y ver las butacas repletas hasta el fondo”.
Y es que cuando se da un acercamiento al arte tan impresionante, especialmente a un público ya experimentado en este tipo de eventos, como es el queretano, se garantiza, además de casa llena, una apreciación muy fuerte de los espectadores.
Comúnmente se podía escuchar en los cafés, restaurantes y callejones cercanos a las sedes las opiniones positivas y efusivas, tanto de conocedores de las artes escénicas como de gente que nunca había visto un evento de este tipo.
“Cuando estaba allá arriba, me encantaba ver todos los asientos ocupados”, comentó José Ángel Cantú, bailarín, “pero cuando quería ver otros espectáculos, me habría gustado que alguien se quitara para que me dejara ver”, agregó entre risas.
La distancia nos separa, el arte nos une
Festivales como Siguientescena no se dan muy seguido en México, así que es increíblemente reconfortante que éste, uno de los pocos de su categoría, sea tan reconocido, concurrido y exitoso.
La difusión del arte y la cultura en este país es sumamente necesaria para el desarrollo personal y social de nuestra población. Una sociedad culta es una sociedad inteligente, y una sociedad artística es una sociedad creativa.
Los directores, artistas y espectadores se llevarán el gran aprecio de todos los involucrados, y las posibilidades de reunirse otra vez por el arte podrán darse. Siguientescena es más que una celebración del arte. Es una celebración de la vida.
Redactó Luis López, alumno de LMI del Tec de Monterrey.-
http://www.horacero.com.mx/noticia/index.asp?id=NHCVL31006
